Tener deudas puede ser un problema cuando tus acreedores te persiguen tanto de manera telefónica y bancaria, en esos casos la portabilidad de nómina y numérica puede ser un problema, ya que surgen las dudas si ¿es posible hacer una portabilidad con deuda? En este artículo te explicaremos a detalle cómo afrontar la portabilidad cuando te encuentras en deuda.
Antes de iniciar es importante conocer algunos conceptos básicos que nos permitirán entender el trasfondo y los derechos que tenemos como consumidores respecto a los diferentes servicios.
¿Qué es la portabilidad de nómina?
La portabilidad de nómina o también llamada portabilidad financiera es un derecho que tenemos como consumidor de poder cambiar de banco o transferir nuestros ahorros de una institución bancaria a otra, esto con el fin de que nos beneficie como consumidor.
Al hacer esto podríamos acceder a mejores tasas, una cuota más amigable con nuestro presupuesto, plazos más favorables, etc. Sin embargo, debemos de tener en cuenta los requisitos de cada institución ya que en algunos casos de no cumplir, no podremos acceder a estos beneficios financieros.
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¿Qué es la portabilidad numérica?
Por otro lado la portabilidad numérica se refiere a la telefonía móvil, es decir es un beneficio que le permite al usuario hacer un cambio de compañía u operadora móvil que le permita tener mejores rendimientos respecto a lo que paga por su plan de telefonía.
En términos generales, la portabilidad te permite conservar tu número (si así lo deseas) y tu equipo para que puedas acceder a los beneficios que te brinda la compañía que te estás cambiando o por la situación de que hagas el cambio. Sin embargo, ¿qué pasa cuando se tiene una deuda?
Portabilidad con deuda
La portabilidad con deuda sí es posible tanto para las personas que quieren hacer una portabilidad de nómina, y también portabilidad numérica. Sin embargo, debes tener en cuenta los siguientes parámetros, ya que si te cambias por el acoso de las casas de cobranza o porque tienes miedo a que tu dinero desaparezca de tu cuenta, tienes que saber que si tienes deuda y haces una portabilidad:
- La deuda no desaparecerá, por lo que por más que cambies de institución deberás pagarla
- Las llamadas de cobranza seguirán, si cambias de número, el banco buscará la forma de encontrar tu nuevo número
- Puede que tu dinero desaparezca en la nueva cuenta de nómina, si se te olvidó leer las letras chiquitas, tu banco podría cobrarle a lo chino
- Los intereses pueden crecer, por lo que si la portabilidad lo haces con el fin de que cese, podría afectar
¿Qué puedo hacer si tengo deudas y no puedo pagarlas?
Si quieres hacer la portabilidad porque tus acreedores están molestando con que pagues tus deudas y no sabes cómo puedes pagarlas. Te compartimos tres formas diferentes que pueden ayudarte a liquidar tus deudas de una vez por todas, y evitar que te sigan quitando dinero de tu quincena o tu nómina.
Tres formas de pagar tus deudas sin necesidad de endeudarte más:
- Consolidar tus deudas: esta forma se trata de solicitar un nuevo préstamo ya sea a tu banco acreedor o a uno nuevo, este nuevo dinero cubrirá la deuda actual y buscará tener una tasa y plazos más bajos. Es recomendable para personas que no tengan atrasos en su deudas.
- Reestructuración de deuda: esta forma de pagar tus deudas se trata de negociar con tu banco, tu cuenta actual con el fin de mejorar los términos y condiciones, con mejores plazos y tasa de interés.
- Reparadora de crédito: esta forma para pagar tus deudas implica adquirir los servicios de una empresa externa, con el fin de que realicen un plan de pagos para pagar tus deudas, mientras ellos negocian un descuento con tu deuda, podrías pagar hasta 70 %.
¿Hago o no la portabilidad con mis deudas activas?
Sí, puedes hacer tu portabilidad de nómina y numérica, siempre y cuando no estés huyendo de ellas, ya que puede salir perjudicial. Por lo que te recomendamos que si lo estás haciendo para evitar tus deudas, es mejor que afrontes con las tres recomendaciones que te compartimos para pagar.
Si no tienes deudas con atrasos y solo quieres cambiar de banco o de número por situaciones completamente diferentes a las presentadas, puedes hacerlo sin ningún problema sin que esto te provoque problemas con tus deudas, solo recuerda pagar siempre a tiempo para evitar pagar intereses.
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